Páginas

Otro año más


No he terminado de asimilar el año cuando ya está empezando otro, y me siento incapaz de distinguir si él ha llegado demasiado pronto o es que yo he ido con retraso. Supongo que en estas fechas todos pensamos lo mismo y estamos cansados de oírlo pero... ¡qué bestia tan rápida e imparable es el Tiempo! Consigue convertirse así en el monstruo que más miedo me da de todos, en uno real.

Respecto al año 2013 que vamos a dejar atrás tengo que tacharlo como el mayor período de madurez de mi vida, desde la segunda semana de enero hasta el mismo día de hoy. Pero reconozco que tengo la sensación de irme a medias, como si no hubiese terminado de absorber todo lo que podría... Esa sensación que tienes cuando te duchas y vistes rápido para salir a tiempo de casa, pero al final atraviesas la puerta con los cordones desabrochados. Puedes continuar y llegarás puntual, pero aun así sabes que algo falla. 

En 2014 yo sólo espero no pisarme los cordones que olvidé atar este año. Aunque, al fin y al cabo, no será más que otro aperitivo para mi (¿nuestra?) temida y atemporal bestia.

0 comentarios:

Publicar un comentario